lunes, 1 de marzo de 2010

Hasta luego, abuela!

Esta mañana hemos ido al pediatra de la Seguridad Social con la abuela, ya pesas 4,300 kg. y mides 53,5 cm (según ellos), tienes el ojo derecho un poco legañoso, pero con limpiarlo con un poco de suero fisiológico es suficiente. Por lo demás, estás muy bien. Ya no tenemos que volver hasta que cumplas dos meses, para ponerte las vacunas.
Y después del médico la abuela se fue, ella piensa que no, pero ¡no sabe lo que la vamos a echar de menos! Han sido tres días en los que mamá no se agobiaba porque siempre había alguien que podía cuidarte y además me hacía compañía, que me viene muy bien.
¡Pero hay que acostumbrarse a nuestra nueva vida! Y aquí estoy escribiendo en el ordenador, con tu toallita y tu chupete en la mesa (por si los necesitas) y contigo en la hamaca a mi lado (pausa para limpiarte un poco de leche que se te sale por la boca).
Se que te estoy malcriando, pero es que no soporto oirte llorar. Papá dice que hay que dejarte llorar un poco, no podemos estar ahí en cuanto tú haces "gua" y se que tiene razón, pero ¡qué hago con ese agujero del estómago! Pero voy a ser fuerte, por ti y por mi y voy a intentarlo. Por lo menos cuando esté papá, no se si podré hacerlo cuando esté sola. Poco a poco...

No hay comentarios:

Publicar un comentario